Ray Bradbury, la gran leyenda de la literatura de ciencia ficción. (Rubén Digilio)
06/06/12 - 11:34 Su nombre es desde hace décadas sinónimo de la ciencia ficción y la fantasía. La explicación es simple: de su mano salieron algunos de los títulos más representativos, desde los relatos de sus Crónicas Marcianas (1950) y El hombre ilustrado (1951) a su novela más famosa, Farenheit 451 (1953). Hoy Ray Bradbury falleció en la ciudad de California.
La noticia fue dada a conocer por una de las hijas del escritor, aquellas a las cuando eran muy pequeñas y él todavía no tenía ni la fama ni el dinero que le llegaron tras los éxitos y sus ingresos apenas le alcanzaban para llegar a fin de mes, según él mismo contó, les compraba libros de oferta, para que pudieran jugar con ellos e incluso romperlos pero se acostumbraran a tenerlos.Bradbury nació el 22 de agosto de 1920 en Waukegan, en el estado norteamericano de Illinois. No fue a la universidad: fue un autodidacta y un ávido lector. Tras trabajar como repartidor de periódicos, ya a principios la década de 1940 comenzó a vender sus primeros cuentos.
Las primeras compilaciones de sus cuentos –Crónicas Marcianas y El hombre ilustrado- no sólo fueron exitosas sino que se convirtieron con el tiempo en clásicos de la ciencia ficción, al igual que Farenheit 451, esa novela futurista en la que los bomberos no se dedicaban a apagar incendios sino a quemar libros, y que fue llevada al cine en 1966 por Francois Truffaut.
Bradbury escribió también en otros géneros y fue un activo guionista. Una de esas incursiones fuera de la ciencia ficción fue como guionista de la versión de Moby Dick de 1956 dirigida por John Houston; de su participación en ese proyecto escribió además un libro (Sombras verdes, ballena blanca).
Además de haberse convertido en referente de un género –él se consideraba más escritor de fantasía que de ciencia ficción, en la delgada línea que separa a uno del otro-, Bradbury fue un escritor de los que lograron conjugar éxitos de ventas y amplio reconocimiento. A lo largo de los años recibió numerosos premios y distinciones.
En diálogo con un portal especializado en cine, Danny Karapetian, nieto del escritor, expresó hoy: "Si tuviera que hacer una declaración diría lo mucho que le quiero y lo que lo echo de menos. Espero escuchar los recuerdos que todos tenían de él. Ha influenciado a tantos artistas, escritores, profesores, científicos. y es reconfortante y conmovedor escuchar sus historias".
"Su legado –agregó el nieto del genial escritor- vivirá en su monumental corpus de libros, películas y teatro. Pero más importante aún: en la mente y en los corazones de quienes le leyeron. Era el niño más grande que he conocido".
Además de en la mente y el recuerdo de sus numerosos lectores, su nombre está escrito también en el cielo, literalmente: el asteroide 9766 se llama Bradbury en homenaje al genial escritor que hoy murió en California.
No hay comentarios:
Publicar un comentario