“Yo, Matías”: el pequeño argentino llegó a París"

Por Diego Erlan

Sendra, su creador, habló de Matías, de su madre y de cómo hace humor político.

Moi, Matías. Sendra, entrevistado por Jorge Aulicino (atrás, de pie), ayer en el Salón del Libro de París.

Paris. Enviado Especial - 19/03/12

“Sendra es una especie de cómico natural. Colecciona chistes por la calle y después entra en la redacción y se los cuenta a todos. Algunos son malos, otros regulares y otros muy buenos.” Así, Jorge Aulicino, Editor General Adjunto de Ñ , la revista cultural de Clarín , presentó ayer, en el Salón del Libro de París, a Fernando Sendra. Junto a ellos: imágenes de su serie más popular, “Yo, Matías”, mostraban el estilo y los personajes que Sendra entrega cada día a los lectores de Clarín .
El humorista nacido en Mar del Plata en 1949, aprovechó esta charla ante un auditorio que empezaba a descubrirlo para hablar de ese niño que cautiva a tantas personas todos los días. Matías surgió como personaje secundario en la tira de un compadrito, “Prudencio, el reflexivo” y a principios de los 90 fue ganando espacio a partir de los diálogos desopilantes con la madre, que nunca aparece pero a quien se escucha.
Aulicino quiso saber si este detalle fue premeditado. “Mis amigos y compañeros de trabajo –dijo Sendra– me relatan cómo es la madre de Matías: me dicen que es hermosa. Primero porque es muy femenina al hablar, es independiente y también está separada, y ese es el sueño de todo hombre. Es una mujer que adora a su hijo pero también quiere mucho ejercer su naturaleza de mujer. Ella gusta de los hombres y le gusta llamar la atención de los hombres, pero a la vez mantiene su espacio con su hijo. En una palabra, es una mujer como las que me gustan a mí .” Sendra construyó su personaje en el país de Mafalda. Mientras ella es una niña con una inquietud social muy marcada, Matías tiene inquietudes edípicas. Es un niño psicoanalizado que habla sobre su sexualidad y hace preguntas difíciles. Pero Sendra explica que “no son preguntas sociales como las de Mafalda sino preguntas que tienen que ver con la madre: con quién sale, para qué va a salir, a qué hora vuelve”.
En Clarín, Sendra también desarrolla su humor en una serie dedicada a la pareja y a conversaciones sobre sexo y en otra de actualidad política. “Es el espacio más difícil de mantener porque para un viaje como éste tenemos que recurrir a viejos errores de los políticos y no a los nuevos. Me voy 10 días y tengo que pensar en errores reiterados.” Los políticos son como los boxeadores, dirá Sendra. “Sabemos que nos van a pegar una trompada pero no sabemos dónde. El problema es cuando los políticos cometen un error que se prolonga por meses. Por ejemplo: la inflación es uno de esos errores de los que tenemos que hablar siempre.” Hay una serie de sus dibujos en la primera página de Clarín donde aparecen periodistas radiales que comentan noticias. El último, que hace la observación más cáustica, es el más pequeño. Aulicino quiso saber: “¿Este es el Matías político?” “Nunca lo pensé así –respondió Sendra–. En general la estructura son dos personajes hablando. Y un tercero me pareció que sería el indicado para hacer la reflexión cáustica, y la más retorcida.”