G  A  B I T O  Y S U  D E M E N C I A  S E N I L. 

                                        por  Hugo Vásquez Caez (Colombia) 

 

Hace  poco nos sorprendió el hermano de  Gabito con la noticia de que el Nobel,  sufría de una enfermedad llamada DEMENCIA SENIL .Estoy seguro que  a todos los que nos  consideramos sus buenos amigos, se nos humedecieron los ojos, por que según algunos neurólogos esta es la puerta de entrada del Alzheimer. A Dios gracias  la semana pasada vimos un video donde festejaba con su familia y amigos los 85 años  de edad, y lo hacia  gozando con esa personalidad y humor que les son innatas. Cuando invitó a su esposa, Mercedes nuestra coterránea a bailar, lo hizo con ademanes propios de su estilo y comencé  a evocar los ratos felices que pasamos cuando estudiábamos en Cartagena. 

Conocí a Gabito en Magangue en la casa  de la señora Hortensia García, madre del Néstor Padilla, alias el “Chueco Padilla”,  que era su gran amigo y todas las tardes nos sentábamos en el sardinel  de su casa, para ver salir a las alumnas del Colegio de la Purificación, que quedaba  al frente y nos entreteníamos comiendo mamon. En el patio había un árbol que daba este fruto todo el año y la señora Hortensia se molestaba por que le dejábamos las conchas y las pepas en la puerta. 

 Una tarde Gabito se presentó con una caja de cartón y nos dijo: Con una voz y una mirada  picarescas: “desde hoy todo el desperdicio  va a esta caja y así tranquilizamos a  la señora Hortensia y esta actitud de mi parte, les demuestra que yo no vengo a ver las alumnas, sino a comer mamon”.

Gabito  siempre le ha rendido culto a la belleza por ello los sábados nos buscaba  y nos decía: “vamos a   “esquinar” frente al vetusto Hotel Virrey  o frente a la celebre joyería Cesáreo, para distraer la vista y el espirito ante el desfile de tantas bellas cartageneras que nos obligan a poner a trabajar a la imaginación, cuando las fuertes brisas coqueteaban con sus faldas”. 

De este amigo guardo muchos agradables recuerdos   por la sencillez y la nobleza como nos trataba, siempre que nos reuníamos algo nuevo nos traia, un chiste, una noticia, una anécdota para alegrarnos el momento; una tarde se nos presentó con dos sonetos  de su vendimia piedracielista  inspirados  cuando estudiaba bachillerato en el Liceo Nacional de Zipaquira en 1945. Uno se lo regaló al Chueco Padilla, “SI ALGUIEN LLAMA A TU PUERTA” y el otro para mi “SONETO MATINAL A UNA COLEGIADA INGRAVIDA” que son unas perlas literarias. 

Les repito que la preocupación de su demencia senil se me opacó por que esta enfermedad es un “Trastorno mental orgánico, propio del envejecimiento”, en otras palabras, es que los axones y las dendritas de las células cerebrales con la edad se van “oxidando”. Sin dudarlo el tratamiento que tiene es muy efectivo, y pienso según el video, que pronto tendremos la segunda parte de Cien Años de Soledad. 

Referente a lo anterior les voy a contar una anécdota:

Al  consultorio de un colega llegó un matrimonio de edad avanzada y le llevaron todos los exámenes que podrían serles útiles al medico. A cada uno le dedicó el tiempo necesario para formarse un buen criterio del motivo de la consulta, revisó los exámenes y les dijo: Los felicito ustedes están muy bien y no es prudente recetarles ninguna droga, sigan con la vida que llevan y verán que les va a ir muy bien. No doctor, tiene que mandarnos algo por que a nosotros todo se nos olvida. Señora, eso no es enfermedad y yo no puedo desequilibra mi ética profesional, lo que si puedo es darles un consejo: Compren dos libretas y dos lápices y escriban todo lo que piensan hacer para que  no se les olvide nada. 

Por la noche estaban viendo televisión y el esposo se puso de pie, y la señora le preguntó, para donde vas? y él le contestó: a la cocina; mijo me haces el favor de traerme un helado y unas fresas que están en la nevera, recuerda lo que dijo el medico, ¡apuntalo¡ ¡apuntalo¡.Como crees que se me va  a olvidar un helado y unas fresas. El señor se demoró mas de media hora y se presentó con un plato y dos huevos fritos y la señora le dijo: ¡Mijo se te olvidaron las tostadas¡.  Vejez o Demencia Senil?.